Nueva zona de escalada (al menos para nosotros) en Aguadulce, en la provincia de Almería. Además del Tajo de los Presos y la cercana Garrofa hemos conocido otro muro cerca del pueblo donde hay un puñado de vías deportivas.
Seguimos a Amalica y Pinito que van en la furgo de Amalica. Sin llegar a entrar en el pueblo, cruzamos varios puentes, recorremos pistas de asfalto y arena hasta un camino en bastante mal estado, donde nos dicen que aparquemos.
Desde ahí iremos todos en la furgo de Amalica. Tras hacer un par de tramos a pie, por donde yo no habría metido el coche ni vacío, volvemos a montar en la furgo y en un pis-pas llegamos al aparcamiento.
Una cuesta de unos 15 minutos nos lleva hasta un primer muro de poca altura y descompuesto. Lo rodeamos por la derecha y en poco más de 20 minutos desde el coche llegamos al pie de vía.
Rápidamente nos preparamos y al lío. Amalica empieza por la vía de más a la izquierda, «La fisura de la Tula», que será V+ ó 6a, aproximadamente…
Tras mirar las vías cercanas y ninguna de ellas llamarnos la atención (o tener pinta de muy difíciles), Jara busca más a la derecha buscando un diedro que nos dicen que hay por ahí.
Pinito también prueba la «Tula» y le tiro algunas fotos con su pedazo de cámara réflex.
Jara encuentra el diedro de marras y nos metemos. Se llama «El Diedro de Inma» pero al parecer esta vía y la de su izquierda se cruzan en la segunda chapa y finalmente resulta que hacemos «Para siempre la Seca» que empieza un par de metros a la izquierda y va por la derecha del diedro, con buen canto en la parte central y una placa en la salida que, con el fuerte viento que hace, acongoja bastante…
Mientras, Amalica se mete en una vía unos diez metros a nuestra izquierda, de cuyo nombre no es que no quiera acordarme, es que no me acuerdo, y que comienza por un pequeño diedro.
Yo, aquí es donde me lío, en lugar de tirar recto por el diedro que se ve encima, no se por qué, pero supongo que va por la derecha por otro diedro menos marcado y tiro por ahí. Más tarde Amalica nos comentará nuestro error.
Desde nuestra posición, un poco más arriba que estos chicos, tanto Jara como yo, sacamos buenas fotos de Amalica en acción.
Yo sigo por la vía equivocada, aunque tengo que decir que me gustó equivocarme, la vía no estaba nada mal, pero creo que hubiera disfrutado más el diedro de la izquierda…
Turno de Pinito, del que también sacamos buenas tomas mientras el sol sale y se mete por momentos.
Jara también prueba «Para siempre la Seca», pero no hay ni una foto… que fallo. 😳
Finalmente Amalica se mete en «El Diedro de Inma» pero bien, usando nuestras dos primeras chapas y tirando recto por el diedro. En la siguiente imagen se ve donde empezaría nuestra vía, «Para siempre la Seca», un poco más a la izquierda (se ve la primera chapa en la esquina inferior izquierda) y como decía antes se cruzarían a la altura de la segunda chapa, un cruce un tanto extraño, la verdad.
El sol empieza a recalentarnos y estos se tienen que marchar, así pues, recogemos los bártulos y empezamos la bajada hasta el coche.
Otra zona nueva, ya voy perdiendo la cuenta de todas las que conocemos en Almería.
Pinito y Amalica la verdad es que nunca fallan, siempre que aparecemos por allí sacan un rato para escalar con nosotros.
¡Gracias chicos, y hasta la próxima!
Aupa!